Aún la casa hogar no estaba lista, cuenta la señora Camarena, llegaron cinco niños, hermanos todos , por lo que tuvimos que rentar temporalmente una casa para darle asistencia a los chicos. Una vez terminada la construcción principal, empezamos a expandir las instalaciones,
Vamos lento, porque los recursos siempre son escasos, nuestros recursos los enfocamos en el bienestar de los niños, en su atención y calidad de vida.
Siempre hay personas dispuestas a cooperar, a veces nos mandan zapatos, ropa, fruta, y siempre cualquier ayuda será bien recibida.
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